La 5ta Estación fueron los primeros latinos en ganar hace minutos el Grammy Award 2010 como el Mejor Album Pop Latino en la ceremonia Pre-Telecast desde Los Angeles. El premio para el Mejor Album Latin Rock, Alternative O Urbano fue a manos de los grandes ganadores del año pasado en los Latin Grammy Awards 2009, el dúo Calle 13 que se impuso a Aterciopelados, Bebe, Los Fabulosos Cadillacs y a Wisin y Yandel.
Por otro lado el cantante de Nicaragua, Luis Enrique, se llevó el Grammy en la categoría Best Tropical Latin Album, desplazando a otros favoritos como Omara Portuondo e Isaac Delgado.
Para los puertorriqueños Calle 13 su disco “Los de atrás vienen conmigo” supuso su segundo Grammy después de triunfar ya en 2007 con su trabajo “Residente o visitante”.
La Quinta Estación obtuvo su primer Grammy por el disco “Sin frenos” en una categoría en la que competían con las mexicanas Paulina Rubio (“Gran City Pop”) y Natalia Lafourcade (“Hu hu hu”), el cubano Francisco Céspedes (“Te acuerdas…”) y el guatemalteco Ricardo Arjona (“5to Piso”).
Now in its 14th year, the annual GRAMMY Salute to Classical Music is one of many Los Angeles-based events leading up to Music's Biggest Night on Jan. 31. This year's honoree, presented the President's Merit Award at the Broad Stage in Santa Monica, was one of those indisputable and inevitable choices: masterful tenor (and not-so-secretly, baritone), educator, administrator, and all-around musical powerhouse Plácido Domingo, with a nearly 50-year career and a gleaming global presence.
La autoexigencia y otras cualidades de Plácido Domingo fueron resaltadas el miércoles en la noche por la Academia de la Grabación, que homenajeó al tenor por su trayectoria artística en el mundo de la música clásica. Tiene en su haber más de 100 grabaciones, incluyendo óperas, recopilaciones de arias y duetos; así como una serie de reconocimientos y honoris causa, que van desde la Medalla Presidencial a la Libertad en Estados Unidos hasta Caballero Honorario del Imperio Británico.
Ha ganado tres Latin Grammy y siete Grammy, de los cuales dijo sentirse especialmente orgulloso de dos que ganó en el rubro mejor disco hispano: "100 años de mariachi", de 1999; y "Siempre en mi corazón", de 1984, donde interpreta temas del cubano Ernesto Lecuona.
"Ganar estos Grammy, en estas categorías, me hacen sentir muy orgulloso", apuntó al recibir su galardón de manos del presidente de la Academia Neil Portnow. "Luego de grabar desde hace casi 42 años ... la cosa más terrible es escuchar (lo grabado) porque cada grabación _ sin importar si ganó un Grammy o si fue nominada o lo que sea _ uno recuerda exactamente lo que uno no estuvo haciendo bien", dijo el homenajeado al recibir su galardón. "Uno tiene que ser exigente con uno mismo".
As it happened, the timing and regional positioning couldn't have been more appropriate: Domingo's now eight-year stint as general director of the Los Angeles Opera has reached a recent zenith with the company's lavish, surreal, ambitious, and long-awaited production of Wagner's Ring cycle, culminating this spring.
Master of ceremonies and longtime classical radio broadcaster Rich Caparella led the proceedings, recounting the Domingo story to-date while stirring in current projects musical interludes. Born in Madrid, Spain, in 1941, and raised in Mexico City, Domingo made his Metropolitan Opera debut in 1968 and has thus logged more than 600 performances in that hallowed hall, along with eventually establishing himself as a titan among opera figures. Along the way came the Three Tenors, directing the Washington and L.A. Opera companies, winning seven GRAMMY and three Latin GRAMMY Awards, and taking on more than 130 roles, an unprecedented achievement for an opera singer.
What would a Domingo tribute be without music? Grant Gershon, of Los Angeles Master Chorale fame, conducted a pared-down complement of players from the L.A. Opera orchestra, and four gifted young singers, some who are products of the Domingo-Thornton Young Artists
Program. The 18-year-old tenor Sean Michael Plumb sang "Bella Siccome Un Angelo" from Donizetti's Don Pasquale, and baritone José Adán Pérez represented the Spanish zarzuela genre championed by Domingo (his parents ran a zarzuela company in Mexico City) with "Amor, Vida De Mi Vida" by Federico Moreno Torroba. Tenor Davíd Lomelí nailed the high notes and high emotionality of "Che Gelida Manina," from Puccini's La Boheme, and from the feminine end of the spectrum came soprano Ana María Martínez, who has worked with Domingo and is busy carving out her own international reputation, wowing with "Song To The Moon" from Dvorák's Rusalka. All the while, the kindly and approving master sat in the front row, just a thrown kiss or two away from the spotlighted singers.
At evening's end, Recording Academy President/CEO Neil Portnow did the honors of presenting the President's Merit Award. Ever the gracious legend, Domingo took the microphone and called the presentation, "A very thrilling and emotional evening. After recording for over 42 years, it is difficult to remember each one. But certainly, it's the most terrible thing to listen to them. You remember exactly what you were not doing right. I can tell you that this is absolutely true. You have to be very demanding of yourself.
"We have this privilege to make people happy. For those few hours, they can forget about their troubles. As performers, this is the greatest privilege."
On behalf of Gabriel Abaroa, President of the Latin Recording Academy. “Argentina and all of Latin America has lost an icon with the passing of Roberto Sanchez, “Sandro,” whose sensual dance moves and emphatic vocals made him one of the greatest pioneers of rock in Latin America. Our deepest sympathies extend to his family, friends and fans as we will forever be influenced by his impact on music and Latin culture.”
Los restos del popular cantante argentino Sandro fueron sepultados hoy en un cementerio privado del partido bonaerense de Almirante Brown, luego del velatorio a cajón abierto que se realizó en el parlamento argentino, donde miles de personas despidieron al músico durante casi 24 horas.
Roberto Sánchez, quien falleció el pasado lunes a los 64 años, fue inhumado en el marco de una ceremonia privada que se demoró debido a que una multitud siguió el cortejo desde el Palacio Legislativo hasta el cementerio, previo paso por la casa donde vivía Sandro en Banfield, al sur de la provincia de Buenos Aires.
La caravana partió al mediodía desde el Parlamento al llegar a la residencia del artista se encontró con unas 6.000 personas que lo esperaban para seguir expresándoles su cariño tirándole flores, rosas y besos al auto que trasladaba los restos de cantante.
El velatorio del músico comenzó el lunes y duró casi 24 horas, ya que fue interrumpido solo por un rato durante la madrugada de hoy para abrir las puertas nuevamente a las 10, ante la cantidad de fans que aguardaban para despedir a Sandro.
Unos 50.000 fanáticos despidieron a su ídolo y se enfrentaron a las altas temperaturas del lunes por la tarde seguido de una intensa lluvia por la noche, situación que no los amedrentó.
La ceremonia se llevó a cabo en el Salón de Pasos Perdidos del Congreso Nacional y sin la presencia de cámaras de televisión y fotógrafos, por expreso pedido de su viuda, Olga Garaventa.
La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kircnher, se comunicó con la viuda del artista para expresarle “su respeto y su dolor” por la muerte del ídolo, según informó el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, en declaraciones radiales.
El entrenador del seleccionado, Diego Maradona, aseguró en declaraciones a la prensa que lloró “mucho” por el fallecimiento de Sandro y contó que le hubiera “encantado conocerlo” porque “fue el más grande”.
Entre quienes concurrieron al Parlamento estuvieron la popular conductora de televisión, Susana Giménez, la actriz Soldedad Silveyra, el gobernador bonaerense, Daniel Scioli, y el jefe de Gabinete.
Un patrullero policial encabezó la caravana de nueve automóviles con coronas que precedieron al coche fúnebre, cubierto con una bandera argentina, que además fue acompañado por dos helicópteros y una autobomba que hizo sonar la sirena a lo largo del extenso recorrido.
Los canales de televisión, las radios y los diarios online siguieron minuto a minuto los detalles de la despedida y el impacto por su muerte fue comparado con el causado tras el fallecimiendo de Carlos Gardel.
Sandro, afectado por su adicción al tabaco, falleció el lunes a las 20:40 (23:40 GMT) en el Hospital Italiano de la ciudad de Mendoza, donde el 20 de noviembre había sido sometido a un trasplante de corazón y pulmones.
Durante varias semanas el músico luchó para recuperarse y fue sometido a cinco operaciones más, aunque el lunes no pudo sobreponerse a un shock séptico.
Los médicos que asistieron al artista afirmaron que hicieron “todo lo posible” para salvar su vida y expresaron que el cantante “dejó varios mensajes” a favor de la donación de órganos y contra las adicciones, en relación a la inclinación del músico por el tabaco.
La muerte de Sandro generó conmoción entre los fanáticos del artista, así como también de reconocidas personalidades del espectáculo y de la política, quienes elogiaron la trayectoria del cantante con frases como “se fue un ídolo popular”, “tenía un don especial” y “es como el fallecimiento de Gardel”.